Tercer Informe de Gobierno Gobernador Alfonso Durazo Montaño

Estamos a unos días de que el presidente Andrés Manuel López Obrador concluya su gestión.

– Una gestión a la que la Historia, con mayúsculas, reservará una página estelar.

– Tengo la certeza de que acudirá al juicio de la Historia con la frente en alto y acompañado por el corazón de su pueblo.

– El cambio de régimen impulsado durante su gobierno trascenderá sexenios y sexenios.

– Su triunfo simbolizó un nuevo capítulo en la historia de México.

– En 2018, los agoreros del desastre y del terror quisieron asustar al pueblo con el fantasma de la dictadura y los peligros para México. No lo consiguieron.

– Sin su empuje, no hubiera sido posible el cambio que vive nuestro País y que viene desde abajo.

– Su lucha de décadas por la democracia y por los más pobres marca un antes y un después para el pueblo mexicano.

– Su triunfo en 2018 fue un viento fresco que trajo un espíritu de transformación en nuestro país.

– Fue una victoria de la honestidad sobre el cinismo, del pueblo sobre las élites que habían gobernado durante tanto tiempo sin entender ni atender las necesidades de la mayoría.

– Puso los cimientos de un México nuevo donde los pobres, los abandonados de siempre, adquirieron la prioridad que les corresponde en las políticas públicas.

– Donde donde el bienestar ha desplazado a la mezquina visión neoliberal, anclada en la rentabilidad individual.

– Donde el combate a la corrupción es parte medular del proyecto transformador, donde los salarios y las condiciones laborales han mejorado sensiblemente.

– Pero su obra más valiosa que da sustento a un cambio de régimen, son la separación del poder político del poder económico.

– La transformación constitucional del Estado mexicano a un Estado de Bienestar y la reforma al Poder Judicial.

– Cerramos el paso al neoliberalismo, diseñado para beneficiar a unos cuantos.

– Se optó por una modernización edificada desde abajo, incluyente, justa, orientada al bienestar compartido y creadora de oportunidades para todas y todos.
Los pueblos originarios, custodios de nuestras raíces y de una herencia cultural invaluable, habían sido marginados y olvidados por el sistema, durante siglos.

– En esta nueva era de transformación, nuestro gobierno los ha puesto en el centro de sus políticas, reconociendo su derecho a un desarrollo integral y respetuoso de su identidad y tradiciones.

– Ha implementado programas que promueven su inclusión económica, social y cultural, asegurando que sus voces sean escuchadas y que sus necesidades sean atendidas con dignidad y respeto.

– Y a Sonora no le pudo haber ido mejor con el presidente López Obrador.

– Ha visitado la entidad en 30 ocasiones y en cada una de ellas nos ha dejado invariablemente algo valioso.

– Sus 30 visitas a la entidad se traducen en una inversión de 112 mil 197 millones de pesos en nuestro estado, durante su sexenio.

– Sin su compromiso con Sonora sería imposible contar hoy con la planta de Puerto Peñasco.

– Sin su apoyo hubiesen sido posibles los planes de justicia para los pueblos originarios del estado.

– Solo considérese la inversión que ha significado el Plan de Justicia Yaqui: más de 16 mil millones de pesos en proyectos que incluyen la restitución de 50 mil hectáreas y la creación del distrito de riego 018.

– La construcción del acueducto de 150 kilómetros que distribuirá agua de la presa El Oviachic a los ocho pueblos de la nación Yaqui.

– O el Plan de Justicia Seri, que contempla la construcción de un acueducto que satisface una vieja demanda.

– O el Plan de Justicia para Cananea, orientado a resarcir añejas carencias sociales.

– La modernización del puerto de Guaymas, diseñado para convertirlo en punta de lanza de la reactivación de la economía estatal.

– Esto, explica porqué hoy en Sonora el Presidente Andres Manuel López Obrador cuenta con el 91% de aprobación en nuestro estado.

– Por ese cariño que el presidente López Obrador nos ha demostrado con hechos, va desde aquí el mayor de los agradecimientos.

– Su ejemplo y autoridad moral, su empatía con los menos favorecidos y su incansable ritmo de trabajo, son legado que dejarán una marca indeleble en el corazón de las y los sonorenses.